La newsletter es una potente herramienta de comunicación y fidelización. Por un lado, el correo electrónico es el servicio de Internet más utilizado por la gente en cualquier franja de edad, según las encuestas; y por otro lado, una newsletter es un canal directo que dirigimos a un target que sabemos que tiene interés y predisposición a leer nuestra newsletter, dado que se han suscrito voluntariamente.
Pero para que nuestra comunicación con esta herramienta sea eficiente, es muy importante que sepamos cómo escribir nuestra newsletter.
Lo primero que tenemos que plantearnos es ¿Cómo va a leer nuestro destinatario la newsletter? En 1997 Jakob Nielsen publicaba el artículo “Cómo se lee en Internet” que comenzaba así: “No leen. Los usuarios en Internet no leen palabra por palabra sino que escanean el texto eligiendo palabras y extrayendo sentidos”. Como consecuencia, tenemos que escribir y diseñar nuestra newsletter para este tipo de lectura ‘escaneada’.
De entrada, la estructura de la ‘pirámide invertida’ cobra importancia como la mejor estructura para escribir nuestra newsletter.
La ‘pirámide invertida’ es un concepto basado en el periodismo tradicional que sostiene que tenemos que escribir lo más importante al inicio de nuestro artículo, y posteriormente, lo secundario.
El orden correcto cuando escribimos sería:
- Primero, la entrada o ‘lead’: aquí va nuestro mensaje más importante.
- Después, el material que explica y amplía el ‘lead’.
- Luego irían los párrafos que contextualizan.
- Por último, el material secundario o menos importante.
En la web la pirámide invertida llega a ser incluso más importante que en un periódico, dado que los usuarios no harán scroll en la pantalla a no ser que les haya llamado la atención el primer párrafo.
Ahora bien, este esquema puede ser un poco más complejo y a parte de tener en cuenta la pirámide invertida como estructura general de nuestro mail, nuestro contenido puede ir desglosado en pequeñas piezas de pirámides invertidas.
Otros aspectos a tener en cuenta cuando escribimos una newsletter:
- El contenido deberá ser original, fresco, único y contener valor informativo para el lector.
- Generemos contenidos teniendo en cuenta nuestro ‘target’ (a quién nos dirigimos): ¿Qué necesidades informativas tienen? En función de esto, ¿Qué podemos aportarles?
- Nuestras newsletters tienen que ser fáciles de entender y cortas.
- Enlacemos a nuestra web y redes sociales.
- Rompamos la uniformidad del texto:
– Introduzcamos enumeraciones
– Usemos colores y negritas para estructurar los bloques de contenido y facilitar la lectura: las primeras palabras dentro de una enumeración, palabras o frases destacadas…
– Destaquemos los enlaces.
– Los párrafos han de ser cortos y diferenciados.
A pesar de que el objetivo final de nuestra newsletter sea probablemente incrementar nuestras ventas, es importante ser cuidadosos y que el mensaje no sea un bombardeo incesante de ofertas. Las mejores newsletters proveen de información precisa que beneficia a los lectores y ofrecen contenidos de interés para nuestra audiencia más allá de lo que vamos a vender o promocionar. Hablaremos de esto en un próximo post. Suscríbete a nuestro blog para recibirlo en tu mail.
Asimismo, en nuestro taller de Newsletter profundizamos en estos y otros temas técnicos sobre la creación de newsletter.
Muy buena guía. Lo difícil es conseguir un tópico que sea único.Felicitaciones por su aporte,Saludos,
Manuel